Salí por la puerta y me encamine hacia la parada del autobús. Estaba hecha polvo. De repente, oí que alguien me llamaba. Era Luis.
-Eh tu, ¿a dónde vas?- me dijo.
-¿Y tú? - se rió.
- Me voy ya, mañana a las 8 entreno.
- ¿Waterpolo? -asintió- ¿Por la mañana?
- Si jajajajaja. Pero tu no tienes excusa, ¿verdad que no?
- Me duele la cabeza.
- Bueno, me lo creo. Pero solo porque no quiero ir solo en el bus.
Estuvimos hablando de todo, del cole, de su waterpolo, de mi baloncesto... Incluso me dijo que no soportaba a Meg y a sus amigas. Los 15 minutos mejor aprovechados de mi vida.
Y llegamos a mi casa. Para la suya aun quedaban tres manzanas.
-Es mi parada.
-Vaya- yo permanecía sentada. ¿A que esperaba?
Decidí levantarme pero él me volvió a sentar. No sabia como reaccionar. Y entonces, me beso.
4 comentarios:
Awww! Queee monoo! Sigue asii!
Besitos :)
Graaciaas! Mil bessooos
Pon este tipo de entradas más a menudo...¡me encantan!
quee monaa! encaantada
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